Tras el regreso de las vacaciones de invierno, los estudiantes del Instituto se encontraron con cambios en el sector de camarines.
El Instituto invirtió cerca de 37 millones de pesos en realizar una serie de cambios que potenciar la comodidad y seguridad de los usuarios.
El lugar cuenta con obras sanitarias nuevas, desagües de acero inoxidable, cerámicas nuevas tanto en piso (antideslizante) como en muros, aluminio certificado en todas las puertas y ventanas.
Se renovó toda la grifería de las duchas. Además, se modificó la línea eléctrica del lugar y se rebajó el cielo, utilizando placa volcanita resistente a la humedad.
Cada vértice de 90 grados que se generan en las uniones tiene una unión de PVC, de modo de evitar posibles accidentes.
Los camarines tienen nuevas bancas y percheros. Todos estos cambios buscan mejorar las condiciones de los estudiantes y dan respuesta a la solicitud planteada por los apoderados.